Asado y Tango

Felix Losada habla de Buenos Aires

LA PRENSA

Conoce Buenos Aires como el mejor de los dandys y la vive como tal. El lugar que eligió para la entrevista fue el tradicional café de Recoleta "La Biela", sobre la avenida Quintana. Puntual como no podía ser de otra manera, Félix Losada confiesa que en la Argentina no sólo se enamoró sino que "me encontré como en casa, cuando casa era algo mucho más querible de lo que es ahora España".

El primer contacto que tuvo con el país fue por unos amigos argentinos en Madrid "eso hizo que venga a pasar unas Navidades aquí y me encantó. Y vine esas Navidades y al año siguiente, en agosto, en el verano español, volví para el cumpleaños de un amigo y en ese cumpleaños conocí a una chica y me enamore. Y al cabo de un año me case ahí atrás, en la Iglesia del Pilar".

-¿Qué significa Buenos Aires para usted?

-Yo vivo la Argentina como la España que viví cuando era pequeño, con todo lo que eso tiene especialmente de bueno. No se han perdido los hábitos de relacionarse, no se han perdido los hábitos de hablar en la calle. Aquí todavía le puedes preguntar a cualquier persona por una calle, allá la gente da la vuelta 25 veces al mapa con tal de no preguntarle al de al lado, cosa absurda e ineficiente. Y el arte de conversar está claro que aquí no solo se conserva sino que está afianzado.

-Sabiendo de protocolo como sabe, tuvo la oportunidad de ver en televisión los discursos presidenciales...

-No, en eso no. No me voy a meter en camisa de once varas (entre risas). Lo que sí puedo decir es que la mayoría de esos debates son incomprensibles incluso desde un punto de vista sintáctico, gramatical y semántico, porque están referidos a intereses y disputas de grupos muy pequeños a los que le falta la altura que se exige para poder construir cualquier país de forma ambiciosa.

Por ejemplo, la escena de lo de los bonos es inentendible, solo se puede entender en claves de lo que se están diciendo entre ellos. Es patético. La gente tira los periódicos, sigue siendo verdad eso de que el diario que tiro hoy mañana el pescadero envuelve el pescado. Pero si uno agarra los periódicos de esta semana y va viendo desde el anuncio del gobierno hasta la inflación, la verdad es que me reí durante horas: ríete tu del vicepresidente, eso es política fina.

-Veo que está al tanto de todo lo que anduvo pasando en el país

-Todos los días me procuro leer información de la Argentina, de hecho en España el homepage de mi ordenador es Yahoo! y tengo todas noticias de la Argentina. Y es impresionante aparece todo. La gente se olvida que los cambios se hacen votando en las elecciones. La gente ha claudicado en general.

-Ese claudicar lo ve como un fenómeno argentino o es algo que está sucediendo en todo el mundo.

-No es un fenómeno solo de la Argentina, al estar el individuo como productor y consumidor ha renunciado a su papel de actor, de hacedor de la vida social. Ha renunciado a intervenir, la forma de intervención son los políticos y las elecciones. Hay una frase de Edmund Burke que dice que "lo único que se necesita para que triunfe el mal es que los hombres buenos no hagan nada".

0 comentarios: